La primera contraetiqueta de los vinos criados en barrica cumple 40 años
Fue a partir de abril de 1974 cuando el Consejo Regulador especificó un modelo de contraetiqueta para diferenciar las botellas de Rioja de crianza criadas en barrica de roble; completándose la gama con las categorías de reserva y gran reserva a partir de 1980.
Así ha permanecido hasta la actualidad, siendo obligatorio que toda botella de Rioja que sale al mercado lleve el documento de garantía del Consejo que le corresponda.